Declarado como Patrimonio Histórico Nacional, el Jardín Botánico de Río de Janeiro es uno de los más grandes e importantes del mundo.
Cuenta con más de 6.000 especies diferentes de plantas repartidas en diferentes espacios, como el espacio dedicado a las plantas medicinales o el de las insectívoras.
Además ofrece todos los días visitas guiadas en español, posee una pequeña laguna, parques, salas de exposiciones y hasta una galería de palmeras imperiales como acceso principal.
Asimismo, el Café Botánica nos deleita con ricos sándwiches y bebidas.
Se ubica cerca de la laguna de Rodrigo de Freitas, atravesado por el río Dos Macacos, que desemboca en ella, y constituye unos de los principales pulmones de Río: actúa como lugar de esparcimiento y relajación que invita a la lectura y al paseo como una vía de escape dentro de la ciudad.
Abierto al público todos los días del año (excepto el día de Navidad y Año Nuevo), existen para llegar varias líneas de ómnibus (la del 584 desde Copacabana e Ipanema, bajándonos en Rua Jardim Botânico) o el Metro (hasta la estación de Botafogo y haciendo trasbordo desde allí al ómnibus Botafogo/Gávea).